Ediciones Advaitvidya nació hace pocos meses con la ambiciosa intención de transmitir la sabiduría del Hinduismo en idioma castellano por medio de traducciones de textos clásicos y ensayos basados en las enseñanzas de Swami Satyananda Saraswati, Maestro, alma e inspiración de la asociación que da nombre a la editorial (www.advaitavidya.org), la cual, en su corta andadura, de apenas unos meses, ya ha dado a luz dos libros de más que considerable altura espiritual. Estos son “Viveka: el discernimiento entre lo real y lo no real/Vairagya: el desapego”; y “Mauna: la Enseñanza del Silencio”.
Ambos libros, escritos por Swami Satyananda, comparten una estética similar, así como formato y extensión. No es de extrañar, ya que pertenecen a la misma colección, titulada “Diálogos con Swami Satyananda”. En verdad el nombre de la colección es legítimo, pues tras la lectura de ambos libros parece que hubiéramos asistido a una charla cara a cara con el Swami.
El estilo de Swamiji es hermoso en su sencillez. Carece de términos excesivamente complejos, giros floridos o artificios del lenguaje. Presenta la enseñanza de forma clara, precisa y verdadera. Expone las antiguas tradiciones védica y yóguica en toda su rotundidad. En un lenguaje moderno y comprensible, sin embargo, no hace concesiones a la modernidad. Esta Enseñanza no está sujeta a los caprichos de la sociedad inconstante y voluble del consumo rápido, la espiritualidad a la carta y el yoga vendido como un producto. Por el contrario, muestra el valor de la paciencia, la cocción lenta y el verdadero compromiso con la tradición espiritual. Veamos ahora ambos libros:
Viveka/Vairagya nos presenta juntos dos ensayos sobre el discernimiento y el desapego. Es absolutamente legítimo que ambas materias se presenten en el mismo libro, ya que en la tradición del Jñana Yoga, o Yoga del conocimiento, no puede tenerse discernimiento sin desarrollar desapego, y viceversa; son dos caras de una misma moneda. El proceso de conocer la verdadera esencia del propio Ser requiere de una serie de requisitos para que la Enseñanza del Guru pueda ser absorbida y asimilada por el discípulo. Los dos primeros y más importantes son Viveka, o el discernimiento, el saber diferenciar entre lo que es real, eterno, verdadero e imperecedero, y lo que es irreal, pasajero, falso y mortal; y Vairagya, el desinterés por todo aquello que no nos ayude en nuestro camino hacia la Liberación. Es necesario el uno para tener el otro: no podemos desapegarnos de lo mundano si no sabemos en rigor qué es lo mundano y qué lo espiritual; del mismo modo, no obtendremos discernimiento si permanecemos apegados a los objetos sensuales.
En el libro, la prosa del Swami nos lleva por un emocionante viaje cuyo hilo conductor son estas dos cualidades. Durante el trayecto presenciaremos a grandes Maestros y Gurus del hinduismo, vidas de santos, sentencias de las Escrituras, parábolas tradicionales de la India, historias maravillosas de los Dioses y los sabios hindúes, todo ello para llegar al reconocimiento del Atman, el Ser esencial, lo que de verdad somos, por medio de las dos grandes alas del Yoga, el discernimiento y el desapego.
Este libro contiene además, una serie de preguntas sobre el tema hechas por discípulos del Swami, lo cual hace su lectura aún más aprovechable.
Por su parte, el otro volumen “Mauna, la Enseñanza del Silencio”, nos presenta de forma similar la necesidad del silencio en la vida espiritual. Acostumbrados al ruido constante en nuestras vidas, hemos olvidado por completo la belleza y plenitud que existe en el silencio. Esto no sería grave si este ruido constante se limitase a nuestra vida exterior, en la calle, el trabajo o con la familia. Pero el ruido se halla instalado en nuestra mente. Como una melodía en la que no hubiese pausas ni silencios, esto crea gran desarmonía en nuestras vidas. Ante esta situación tan generalizada, el Swami hace una exposición detallada de la importancia del recogimiento, de guardar espacios de interiorización y silencio mental; y lo que es más, de la transmisión de la sabiduría a través del silencio; pues lo que se escucha en palabras puede ser olvidado, pero lo que se aprende en el Gran Silencio, es inconmensurable y eterno.
El libro, de manera muy similar al anterior, presenta instructivas historias, parábolas y hechos de los Dioses, los santos y los sabios, y además contiene algunas experiencias personales del autor que sin duda serán de incalculable valor para el aspirante espiritual.
Ambos libros cuentan con un anexo con ediciones de los textos y Escrituras citados, tanto en castellano como en inglés, que resultarán de gran ayuda para quien desee indagar más en el corpus escritural védico y la Enseñanza de los Maestros.
En conclusión, es una gran noticia que Advaitavidya se haya lanzado a esta aventura editorial. Sus dos primeras publicaciones ya son una adquisición indispensable para todos los estudiosos del hinduismo, del Yoga o el Vedanta, y una gran oportunidad para los aspirantes espirituales de conocer de una fuente experiencial y autorizada los caminos del Sanatana Dharma, la antigua tradición de los Vedas.
